Pensando

Sierra de Sevilla, julio de 2008.
La muchacha de la foto se llama Cris, la conozco desde hace unos 12 años y, si, siempre es así de guapa. Aquí el fotógrafo no tuvo que esmerarse.
Es muy probable que en la foto estuviese pescando, pero si que de vez en cuando piensa. Sobre todo las veces que ha tenido que ser mi conciencia (aunque no le hiciese caso).
Además, habla cantando y es muy divertida.

Dame Rock n Roll

Jerez, 2 de mayo de 2009.
Otra del concierto gratuito que dio Andrés Calamaro en Jerez con motivo del mundial de motociclismo.
Lo que me gusta de esta foto es como un hombre con una edad considerable y la vida resuelta gracias a la música sigue dándolo todo cada vez que suenan los acordes de una de sus canciones.
Y como él, miles más. AC/DC, Stones, Springsteen, Maiden...

Larga vida al Rock n Roll y a los que nos lo dan.

Recuerdos

La Alfaguara, julio de 2004.
Todos los años desde 1999 me he ido 15 días por ahí, al campo, a caminar, correr, trepar, herirme, quedarme ronco, jugar, etc.
Durante 10 años esperaba que llegase mañana. Este año lo(s) echaré de menos, ya lo estoy haciendo, pero cada etapa tiene su tiempo.

Hoy me encuentro recordando
las historias del ayer.
Son etapas de mi vida que pasé.

Tengo ganas de tí

Florencia, 3 de julio de 2010.
Después de unos días sin asomarme por aquí, vuelvo de Italia cargadito de fotos. No las voy a poner todas de un tirón, pero esto es para ir abriendo boca.

La foto se trata de una de las cadenas situadas junto al Ponte Vecchio en Florencia. Allí, las parejas de novios cuelgan candados para volver, recordar su amor en una de las ciudades más mágicas del mundo o, simplemente, para seguir la tradición.

El candado protagonista dice "Tengo ganas de tí". En un principio no le iba a hacer la foto, pero me lo pidieron y, al final, se ha convertido en una de mis fotos favoritas del viaje.
Y es que, en cuanto llegué a casa, ya tenía ganas de Florencia, de Siena, de Roma, de Pisa, de helados, de pasta, de mercadillos, de carreteras peligrosas, de Renacimiento, y, sobre todo, tenía ganas de tí.